Limpieza de extractos de cocina en uno de los edificios históricos de Londres

Los sistemas de extracción de cocina que dan servicio a los restaurantes estaban en necesidad de una limpieza profunda para reducir la cantidad de carbono y grasa acumulada en los conductos que estaba planteando un riesgo de incendio significativo.

De acuerdo con la Ley de Reforma de la Seguridad contra Incendios de 2005, todos los propietarios y gestores de edificios tienen la responsabilidad de reducir los riesgos de incendio en sus propiedades. Las mejores prácticas de mantenimiento de los sistemas de extracción de la cocina se enumeran en el documento TR19 Grease de la Building and Engineering Services Association (BESA), que ofrece directrices claras sobre los métodos de limpieza aceptados, los informes y los intervalos para reducir el riesgo de incendio a un nivel seguro.

Los intentos anteriores de limpiar los conductos in situ sólo habían logrado niveles parciales de cumplimiento, y algunas secciones grandes de los conductos seguían sin limpiarse, lo que suponía un peligro para el edificio.

Utilizando el marco de cumplimiento BESA TR19 como guía, se tomaron las siguientes medidas para eliminar la grasa de los conductos: 

1. Instalación de puertas de acceso en los conductos a intervalos de 2 m para acceder a ellos para su limpieza.
2. Se desatornilló y desmontó completamente el ventilador en línea para desmontarlo y limpiarlo.
3. Se utilizó un cepillo motorizado para limpiar los conductos de difícil acceso ocultos en un hueco detrás de una pared.

Después de la limpieza, el sistema se ha limpiado hasta dejar el metal desnudo con un plan de mantenimiento para mantener los depósitos de grasa por debajo de las 200 micras indicadas como peligro de incendio en la norma BESA TR19.